Capítulo 1

Otra vez la misma rutina de siempre. Clases y clases interminables. Todo un sufrimiento para cualquier adolescente incluida yo. Empezaba 3º de la ESO en un curso donde apenas conocía a nadie, ¡y aún encima me tocaba en la clase de mi ex! Mis amigas estaban felices, ellas iban todas juntas y a mí fue a la única que separaron de todas.

Eran las 12 de la mañana, quedaban 15 minutos para que empezara la presentación del nuevo curso 2010-2011. Yo tenía el ánimo por los suelos y eso debió de notarse porque Alba se acercó a mí y me dijo:

-         - No te preocupes por nada, Paula –comentó. – Harás amigos en clase y nos tendrás a nosotras en el recreo.

-        - ¡Claro que sí! –exclamó Helen. –No te vamos a dejar sola nunca.

-         - Gracias por tratar de animarme pero hoy nadie puede hacerlo- contesté hundiendo mi cara entre mis manos.

-         - ¡No llores! Paula, ya verás como todo sale bien- insistían todas.

-          - ¿Cómo no voy a llorar? No veis que además de ir sola me tocó en clase de Salva. Sabéis que aún no he superado del todo que me dejara.

-          - Pero lo harás. Es cuestión de mirar a otros chicos- afirmó Alba.

-          - Chicas, es mejor que vayamos yendo hacia el instituto- advirtió Irene. –Quedan exactamente 5 minutos para que comience la presentación.

-        -  Está bien. ¡Vámonos! – grité y salí corriendo.

(Narra Justin)

Era increíble ver a todas las fans mirando hacia el coche en el que me encontraba. ¿Cómo se enterarían de que iba a venir a este instituto? O peor aún, ¿cómo se enterarían de que estoy viviendo en esta ciudad? Aún estaba acostumbrándome a mi nueva vida. Había dejado la música hasta que acabara el bachillerato. Era mi primer día en clase. Estaba nervioso. No sabía cómo serían mis nuevos compañeros pero esperaba que me trataran como a un chico normal.

Salí del coche con mi guardaespaldas delante de mí. Las fans chillaban a más no poder, pero todas eran chicas. Siempre eran chicas. No me gustaba ser el centro de atención y siempre lo era.

Me encaminé hacia la puerta y me paré delante de las listas de 1º de bachillerato. Iba en B. Después de ojear un poco los nombres de mis compañeros me dirigí hacia el salón de actos, que ya sabía dónde se encontraba. Fue una suerte que la dirección del centro me enseñara el instituto unos días antes de empezar las clases porque no podría seguir a la gente ya que son ellos los que me siguen a mí. Todos me estaban mirando con asombro y eso me hacía estar incómodo. Los chicos me lanzaban miradas asesinas y las chicas me seguían y me gritaban:

-          - ¡Justin! ¡Te quiero!

-          - ¡Justin! ¡Sácate una foto conmigo!

Otras me agarraban y me abrazaban. Hasta una chica intentó besarme. Sería incómodo para cualquiera que te hiciesen eso.